"El día que el hincha deje de exigir, River va a dejar de ser grande" dijo uno de los mejores defensores de la historia del fútbol argentino, pero parece que para muchos esa frase quedó en el olvido y prefieren la cultura del aguante.
Hace varias décadas atrás, el gran Roberto Perfumo, entendió a la perfección una de las características principales de los hinchas de River, pero que con el correr de los años este fue mutando. No quiero alzar la mano como "La Voz Del Hincha", ni mucho menos, solo soy uno más como todos ustedes, que quizás tuvo la suerte de trabajar de lo que le gusta y estar en medios de comunicación, pero escribo esto en un simple blog, porque me preocupa el presente de una de las cuatro patas fundamentales para que este club salga adelante. Su gente.
Hace más de 10 años River comenzó a pasar pésimos momentos futbolísticos, producto a dirigencia nefastas, técnicos mediocres y jugadores falopa (tal vez lo único bueno q hizo Passarella tras dejas de jugar al fútbol, decir esa frase) y el 'nuevo hincha", el que empezó a ir a la cancha solo o con amigos en esa época, se agarró de la única pequeña alegría que le daba el equipo. La hinchada.
En ese momento (2008) nos importó más haber sido primeros en recaudación, haber llenado todas las canchas y haber jugado pésimo durante más de un año, porque habíamos sido campeones. Ganamos uno de los peores títulos de nuestra historia. Hacíamos un gol y nos tirábamos atrás y por eso muy pocos triunfos fueron por más de un gol de diferencia. Pero esa camada nueva de hinchas, se conformaba con los triunfos porque dieron resultado y los que fuimos criados con el paladar de nuestros padres/abuelos, si criticábamos el nivel futbolístico comenzamos a ser "atacados" con frases como "A la cancha se viene a alentar", " Si criticas sos bostero", "Porque no entras a jugar vos", " Ustedes son hinchas del resultado" y cosas por el estilo, siendo que pretendían que nos conformemos con ver jugar una defensa conformada por Cabral y Nico Sanchez.
Desde aquel partido contra Estudiantes de La Plata, disputado en la ciudad de las diagonales, donde River empató de visitante y sumó su décimo cuarto punto en 19 fechas, con apenas dos triunfos, sin poder superar a Rosario Central por una unidad, dejó al ex equipo de Simeone (porque cuando el barco se hunde, las primeras que huyen son las ratas) por primera vez en más de 100 años de vida en el fondo de la tabla de posiciones, marcó ese clic que menciono. Ya que esa tarde, quienes estábamos en la cancha nos quedamos cantando como si el equipo hubiese salido campeón, porque llenamos el estadio siendo visitantes con el emblema "En las malas mucho más".
Para colmo en esos días se dio la eliminación de la Copa Libertadores a manos de San Lorenzo y Ahumada dijo esa frase que hirió casi de muerte el paladar negro. El hincha se sintió tocado y a donde sea que iba se hacia escuchar alentando al equipo, sin importar el pésimo momento futbolístico q pasaba. Se empezaron a oír gritos de guerra cuando un jugador despejaba una pelota, por más que la tirara a la Centenario alta. Comenzamos a aplaudir cuando alguien iba a trabar con la cabeza y no los firuletes de Ortega o Buonannotte.
Como si fuese poco, los años venideros fueron cada vez peores para un River que se hundía más y más. Aguilar nos hizo mierda y Passarella nos terminó de destruir. El 2011 de River fue el peor de la historia, el peor de mi vida y de la de la mayoría que estará leyendo acá, por eso nos agarramos de lo único q teníamos "Le demostramos lo que es River en las malas", festejábamos haber llenado la cancha en Puerto Madryn, San Juan o cualquier estadio, cuando teníamos que jugar con equipos que se llamaban Guillermo o Desamparados (sin desmerecer a ninguno, simplemente inadmisible para River).
En esos años queríamos ganar "Como sea" como intentó inculcar Gorosito o "Con el cuchillo entre los dientes" según el propio Simeone y nos olvidamos de nuestra historia. Nos olvidamos de la valiocisima Triple G. Si bien la más importante es Ganar, porque de esto se trata este juego, sin Gustar en River no sirve.
Hoy, lejos de esos años tan dolorosos para todos nosotros, habiendo ganado cosas que jamás nos hubiésemos imaginado, después de haberla pasado tan mal, parece que el hincha (en su mayoría) se olvidó lo que la historia de este club marca. Veo mas hinchas de Gallardo o de D'onofrio que de River. Y ojo, no digo q no tengan que idolatrar al DT, porque de hecho el Muñeco es uno de mis ídolos personales desde que era chico, por como usaba la 10 en la espalda y por supuesto que soy agradecido de todos los títulos conseguidos estos años, pero River no puede vivir del pasado y aceptar este presente mediocre porque hace 3 años ganamos una libertadores.
No podemos seguir cantando "El que no salta abandonó" o seguir gastando a nuestros rivales con "2 veces en 6 meses" porque eso ya pasó y tenemos que seguir ganando. Es inadmisible el momento futbolístico de los últimos dos años y no por ganar una copita de leche (que por supuesto festejamos) ante rivales menores, vamos a permitir no pelear un campeonato hace varios años, más allá de haber salido segundos el año pasado.
Ni Gallardo, ni Ramón, ni Enzo, ni el propio Labruna son más que River. El club siempre esta por encima de todos los nombre y en parte por eso somos tan grandes, así como también porque siempre les exigimos a esos nombres que lo sean, como le pedimos a Loustau, Pedernera, Muñoz, Moreno y Angelito que Goleen en cada partido, sino se iban silbados.
No estoy diciendo que haya que dejar de ir a la cancha, que no alienten o que insulten a los jugadores, pero tampoco alentar por alentar, apoyar jugadores mediocres que no están a la altura de este club, por el simple hecho de que usa esta camiseta. Para eso si están los del riachuelo, que idolatran a un tipo que tiene un solo título ganado, pero le dio una patada a Ruggeri o los de Avellaneda que por haber estado 35 años sin ganar nada, su máximo logro es hacer grandes recibimientos.
Agarren un par de libros de historia, googleen y busquen en Youtube lo que realmente es River, que hoy no cuesta nada. Volvamos a exigir, si de verdad decimos ser El Mas Grande Lejos, volvamos a exigir serlo.

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